BIENVENIDOS A EDUCACIÓN EN LA MIRA

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sábado, 13 de septiembre de 2008

Normales cerradas, pero no pasa nada.

Un supuesto básico del Interaccionismo Simbólico es que actuamos de forma situada y que las acciones son la unidad empírica de la intención, apoyados en este supuesto analicemos hechos que mueven por lo menos, a risa y que reflejan el nivel de control que sobre el futuro tienen las autoridades públicas estatales.
En el artículo pasado desde la categoría interés, conveníamos que la Alianza por la Calidad de la Educación, era más política que educativa. En esta ocasión nos apoyaremos en la denominada intención desde la acción, para responder a las preguntas, ¿cuáles son los saldos para la secretaría de educación de Veracruz con la firma de la Alianza entre el gobierno de Fidel Herrera y la maestra Elba Esther Gordillo? y, por otro lado, ¿qué horizontes se dibujan para la educación en Veracruz, en el marco de la carrera por las candidaturas del 2009?.
Una verdad obvia es que el poder no se comparte, pueden existir acuerdos o cuotas pero esa es otra cuestión. En el caso de la educación, este es un error político presente en Veracruz, ya que con la firma de la Alianza, las decisiones de política educativa se trasladaron a la ciudad de México, por supuesto, no me refiero a decidir sobre el color de las escuelas o la selección de las sedes para los exámenes de asignación de plazas docentes. Otra cuestión alarmante, es que en el caso de Veracruz, como en el de muchas entidades, la Alianza la firma la máxima autoridad estatal, legalmente instituida, pero no con su contraparte federal, representado por Calderón Hinojosa y delegada en Vázquez Mota, sino con un poder corporativo, el SNTE, no es cuestión menor.

Así, un primer saldo para el gobierno de Veracruz con la firma de la Alianza, es que las decisiones en materia de política educativa se están tomando en las oficinas del SNTE de la ciudad de México e informadas por sus representantes en el poder público.

Otra cuestión es, como ya ocurrió en las últimas semanas, que las autoridades públicas estatales tendrán que defender la Alianza, aunque este no represente necesariamente sus convicciones. Veamos dos ejemplos: el lunes primero de septiembre, ante el embate del SNTE nacional hacia las escuelas formadoras de docentes, la Normal Veracruzana realizó un paro de 12 horas, declarándose públicamente contra la Alianza, como ya lo habían expresado junto con otras organizaciones sindicales semanas anteriores, ese mismo día a pregunta directa de los reporteros una autoridad estatal afirmó, que en Veracruz ningún sindicato estaba en contra de la Alianza, lamentablemente los hechos desmienten las declaraciones. Otra autoridad, informó que se estaba armando un expediente para responderle de manera puntual al Sindicato de la Normal. Sin duda, otro saldo radica en que muchos de los esfuerzos de las autoridades educativas, se destinarán a defender con argumentos técnico-pedagógicos, lo que en realidad es una decisión política.

El próximo sábado contestaremos la segunda pregunta: ¿qué horizontes se dibujan para la educación en Veracruz, en el marco de la carrera por las candidaturas del 2009?, basta con adelantar dos hechos: las reafiliaciones corporativas magisteriales y las demostraciones de fuerza mediante megaconcentraciones.

Nos leemos el próximo sábado

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